domingo, 23 de agosto de 2009

Historias de terror para niños que me recuerdan que siempre hay tiempo para ser feliz.


~Weekends don't count unless you spend them doing something completely pointless.~ Inicio esta entrada con esta frase de Bill Watterson porque hoy especialmente la encuentro cierta. Me explico, son apenas las primeras horas "libres" que tengo esta semana y decidir gastarlas viendo un viejo programa de televisión. Sí, quizá hay miles de cosas mas productivas que podría hacer, pero esto fue algo que me nació de la nada hacerlo.
El programa es nada mas y nada menos que "¿Le temes a la oscuridad?" (Are you afraid of the dark?) Para aquéllos que como yo tuvieron la dicha de crecer en los 90's recordaran éste viejo programa de Nick, en donde varios chicos se juntaban alrededor de una fogata por eso de las 12 de la noche a contar historias de terror [como es que lograban esto sin que sus padres se dieran cuenta honestamente no lo sé xD] En realidad para mí es uno de esos programas inolvidables, de esos que deberían repetir y que nuevas generaciones deberían poder disfrutar [Ah qué ruca me sentí!]
Por cierto, hago una breve pausa solo para decir lo siguiente: ¡¡¡Como extraño el Nick de antes!!! Yo sé que los niños de hoy en día han de pensar que son extremadamente aburridos los programas que yo amaba y veia, pero para mí que las *coughs* jaladas*coughs* digo los programas de hoy en día no les llegan ni a los talones. Probablemente sea por la melancolía y por no querer aceptar que el tiempo ha volado sin que me haya dado cuenta haha, pero la verdad que hoy me provoca lanzarle un zapatazo a la tele cada que le prendo y está Bob Esponja. Bueno dicho esto, regresemos al tema original...
Bueno el punto es que por un par de horas, me divertido como si tuviera de nuevo 6 años. Honestamente me resulta sorprendente recordar como algo tan simple podía divertirme y asustarme (porque si me asustaba) tan fácilmente y como antes las cosas mas sencillas y comunes lograban ponerme una sonrisa en la cara. Al mismo tiempo la melancolía llega acompañada de tristeza pues no puedo evitar preguntarme cuándo fue que perdí la capacidad para sorprenderme, apreciar y alegrarme por las cosas simples, pequeñas, pero importantes de la vida.

He de decir pues que por el día de hoy olvide toda congoja y problema y volví a ser niña por un rato. Ya sea un hospital que repentinamente se llena de vampiros (Tale of the Night Shift), un espanta pajaros que le enseña a un niño que lo que fácil viene fácil va (Tale of the Silent Servant) o un monstruo de ácido que ronda por una piscina escolar (Tale of the Dead Man's Float) Estas historias y éste programa el día de hoy lograron recordarme que siempre hay tiempo para ser feliz.
Bueno y ustedes; ¿Le temen a la oscuridad? xD

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