lunes, 6 de diciembre de 2010

Sin tiempo para el tiempo

Mi muy estimado tiempo: Déjame en paz. ¿Qué carambas te crees cambiando todo a tu paso? Empezando por mí. Te das el lujo de pasar lento y eterno como si no dependiera de ti. Pero cuando quieres te dispones a irte chinga llevandote todo contigo. Bueno pues ya ni siquiera das chance de que se acostumbre uno. Eres tan reiterativo, pero cuando ya creo entender, te vuelves tan inesperadamente cambiante. Me llevas a crecer solo para hacerme más pequeña. Me dejas esperando hasta que termino por olvidar que es lo que queria. Ya has de creer que tú mandas, que no se puede contra ti. Pues ya te puedes ir al carajo has de saber desde hoy que renunció a ti...Me quedo con mi ritmo, mi velocidad y la atemporalidad aunque también sea parte tuya...